"La idea de someterme a una vasectomía me preocupaba, especialmente por el dolor, pero la experiencia fue mucho más sencilla de lo que imaginaba. Me Sedaron para que estuviera relajado durante el procedimiento, y cuando desperté, ya había terminado. No sentí nada en todo momento, ni antes, ni durante, ni después. El equipo médico estuvo increíble, explicándome todo antes y después de la intervención, lo que me dio mucha seguridad. Hoy puedo decir que fue una decisión fácil de tomar, gracias a lo bien que me trataron y lo cómodo que me sentí."
Miguel A - 45 Años
