¿Qué significa Disfunción Miccional?

La disfunción miccional engloba un conjunto de alteraciones en el proceso normal de almacenamiento y eliminación de la orina. Estas alteraciones pueden manifestarse como síntomas de llenado, vaciado o combinados, afectando significativamente la calidad de vida de quienes las padecen. Este trastorno, que afecta tanto a niños como a adultos, representa un motivo frecuente de consulta urológica y requiere un abordaje multidisciplinario para su correcta evaluación y manejo.

 

Fisiología de la Micción Normal

Para comprender adecuadamente la disfunción miccional, es fundamental conocer la fisiología normal del proceso miccional:

 

FASES DE LA MICCIÓN

 

Fase de llenado: Durante esta fase, la vejiga se distiende progresivamente mientras el detrusor se mantiene relajado y el esfínter uretral permanece contraído, permitiendo el almacenamiento de orina a baja presión.

 

Fase de vaciado: Cuando se alcanza un volumen crítico (aproximadam

ente 300-400 ml en adultos), se activa el reflejo miccional, produciéndose la contracción coordinada del detrusor junto con la relajación del esfínter uretral.

 

El Control neurológico de la micción implica una compleja interacción entre:

 

  • Sistema nervioso parasimpático: Mediado por acetilcolina, actúa a través de receptores muscarínicos provocando la contracción del detrusor (músculo vesical).
  • Sistema nervioso simpático: A través de la noradrenalina, favorece el almacenamiento mediante la relajación del detrusor y la contracción del esfínter interno.
  • Sistema nervioso somático: Controla voluntariamente el esfínter externo a través del nervio pudendo.
  • Centros suprapontinos: Proporcionan el control consciente sobre el reflejo miccional, permitiendo iniciar o inhibir la micción según el contexto social adecuado.

 

Clasificación de las disfunciones miccionales

Las disfunciones miccionales pueden clasificarse según diversos criterios:

 

Según la Fase Afectada

Alteraciones de la fase de llenado:

  • Hiperactividad del detrusor
  • Hipersensibilidad vesical
  • Incontinencia urinaria 

 

Alteraciones de la fase de vaciado:

  • Hipoactividad/acontractilidad del detrusor
  • Obstrucción del tracto urinario inferior
  • Disinergia vesicoesfinteriana

 

Según la Etiología

  • Neurogénicas: Secundarias a lesiones o disfunciones del sistema nervioso (lesión medular, esclerosis múltiple, enfermedad de Parkinson, etc.).
  • No neurogénicas: Sin alteración neurológica demostrable:
  • Idiopáticas
  • Miogénicas (alteraciones en la musculatura vesical)
  • Psicógenas
  • Farmacológicas (efectos adversos de medicamentos)
  • Anatómicas (estenosis uretral, hiperplasia prostática, etc.)

 

La disfunción miccional constituye un problema de salud significativo que requiere un enfoque diagnóstico y terapéutico sistematizado y personalizado. El conocimiento de su fisiopatología, las herramientas diagnósticas disponibles y las opciones terapéuticas actuales permiten ofrecer soluciones adaptadas a cada paciente, mejorando significativamente su calidad de vida.

 

Existen una serie de pautas que te permiten, evaluar si tu micción es normal o si en caso contrario, es conveniente visitar al urólogo.

 

  • Cuando te dispones a orinar, deberías poder hacerlo rápidamente, sin dificultad para iniciar la micción y sin necesidad de empujar para que la orina salga.

 

  • Una vez has empezado, deberías tener un chorro fuerte, continuo, sin ninguna interrupción y sin dolor.

 

  • Cuando terminas, pueden salir dos o tres gotas, pero no debería existir un goteo prolongado.

 

  • Al finalizar, deberías quedarte satisfecho, no debes tener sensación de vaciado incompleto ni necesidad de volver a orinar a los 5 o 10 minutos.

 

  • Debes ser capaz de aguantar por lo menos 2 o 3 horas hasta la siguiente vez que tengas ganas de orinar, aunque, claro está, depende de la cantidad de líquidos que bebas.

 

Si de acuerdo con estas indicaciones no tienes una micción normal, te espero en consulta.