Se afirma que el varicocele reduce progresivamente la espermatogénesis a través de una temperatura intratesticular elevada y un flujo sanguíneo testicular alterado; la disminución del suministro de sangre oxigenada y nutrientes a los sitios de secreción de espermatozoides reduce la calidad y cantidad de los espermatozoides y, en consecuencia, su capacidad de fertilidad.
Así mismo, si no se detectara podría causar reducción de tamaño testicular, ya que se seguiría acumulando la sangre, produciendo una mayor presión sobre el testículo y haciendo que este disminuyera de tamaño.
También se ha detectado que el varicocele afecta a la producción de testosterona y que produce alteraciones en la carga genética de los espermatozoides.
La integridad del ADN espermático representa uno de los determinantes vitales de la fertilización normal y el crecimiento embrionario en la concepción natural y asistida.
No todos los hombres con varicocele son infértiles y los pacientes con varicocele clínicamente evidente pueden tener espermatogénesis normal o alterada. Aunque no se ha establecido una relación causa-efecto, múltiples revisiones concluyen que efectivamente existe una asociación evidente entre el varicocele y una mayor fragmentación del ADN.
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