¿Cómo Afecta el Embarazo la Vejiga?

La relación entre el embarazo y la vejiga es compleja, ya que los cambios hormonales y los ajustes físicos se combinan para crear un conjunto único de desafíos y experiencias para las futuras madres.


Durante el embarazo se producen muchos cambios fisiológicos y anatómicos que afectan al tracto urinario inferior. Factores hormonales, cambios en el sistema autónomo, compresión uterina y cambios en los músculos del suelo pélvico son algunos de los factores. Los síntomas urinarios, que suelen aparecer durante el embarazo, provocan una idea errónea entre las mujeres, ya que es un fenómeno normal después del parto. En realidad, el embarazo y la maternidad aumentan el riesgo de incontinencia urinaria entre 2 y 2,6 veces en comparación con las mujeres que nunca han concebido.


Influencia hormonal
A medida que aumentan los niveles de progesterona durante el embarazo, los músculos de la vejiga y las estructuras circundantes se relajan más. Si bien esto es esencial para acomodar el útero en crecimiento y prevenir contracciones prematuras, puede provocar una disminución del tono y la capacidad de la vejiga. Como resultado, las mujeres embarazadas pueden experimentar ganas de orinar con más frecuencia, incluso cuando la vejiga no está necesariamente llena.


Presión y desplazamiento
El útero en expansión por el crecimiento del bebé ejerce presión sobre los órganos circundantes, lo que tiene un efecto sobre la vejiga. Esta presión puede provocar la necesidad de ir al baño con más frecuencia, especialmente durante las últimas etapas del embarazo. La presión también puede provocar un vaciado incompleto de la vejiga, lo que contribuye a la sensación de urgencia. Durante las últimas etapas del embarazo, la presión sobre la vejiga puede volverse aún más pronunciada.


Debilitamiento del suelo pélvico
El debilitamiento de los músculos del suelo pélvico debido a factores hormonales y al aumento de presión puede afectar la vejiga durante el embarazo. Estos músculos desempeñan un papel vital en el soporte de la vejiga y el control de la liberación de orina.


Incontinencia urinaria
La combinación de cambios hormonales, presión sobre la vejiga y relajación de los músculos del suelo pélvico puede provocar un fenómeno conocido como incontinencia urinaria. Esta afección implica pérdida involuntaria de orina, particularmente al toser, estornudar, reír o realizar actividades físicas. La incontinencia urinaria de esfuerzo, como se la llama, puede ser un efecto secundario frustrante y vergonzoso del embarazo.


Cambios post-parto
Los efectos del embarazo en la vejiga no necesariamente terminan con el parto. Si bien algunos cambios pueden volver gradualmente a su estado anterior al embarazo, otras alteraciones pueden persistir durante algún tiempo. Los músculos del suelo pélvico pueden sufrir tensión durante el trabajo de parto y el parto, lo que podría provocar problemas continuos con el control urinario.


Sin embargo, la orientación médica, la fisioterapia y los ejercicios adecuados del suelo pélvico, pueden ayudar a recuperar el control de la vejiga y minimizar el impacto de estos cambios.


No se puede ocultar que el embarazo puede afectar la vejiga. Si bien estos efectos son comunes y esperados, es esencial que las futuras madres comprendan estos cambios para mantener la salud durante el embarazo y más allá.


Si necesitas ayuda con cualquier problema relacionado con la vejiga o sistema urinario, puedes programar una cita al +593 990 862 201 o contactarnos por info@drakarelia.ec